Frederik Thiele: un hombre con una misión

Prácticamente nació con un par de gafas. Ahora Frederik Thiele ha decidido ofrecer unas elegantes gafas de lectura directamente a la puerta de los consumidores. La idea surgió de forma fortuita mientras estaba en la esquina de su tienda en el aeropuerto de Copenhague.

Al principio se imaginaba vendiendo gafas de sol caras a los viajeros que querían completar su guardarropa antes de unas vacaciones exóticas y excesivamente caras. En cambio, los viajeros se apresuraron a entrar en su tienda de gafas de sol, buscando desesperadamente otra cosa:

"La gente entraba corriendo para coger un par de gafas de lectura. A menudo hacían cola para encontrar unas gafas baratas como las que habían olvidado en casa y sin las que no podían vivir para disfrutar de sus vacaciones. Acabamos vendiendo miles de gafas de lectura, ¡lo que sorprendió por completo nuestras expectativas! Para empezar, nuestras gafas de lectura estaban escondidas en la esquina trasera de la tienda", explica Frederik.

Con el tiempo, las gafas de lectura constituían la mitad de la tienda de Frederik Thiele y representaban una gran parte de los ingresos totales.


"Fue una gran sorpresa para mí cuando descubrí lo extraordinaria que era la demanda de gafas de lectura baratas. En aquel momento, nunca había pensado mucho en ello y, sinceramente, sólo tenía las gafas de lectura en las estanterías para que sirvieran de complemento a las gafas de sol", confesó.

El rebaño de clientes desesperados del aeropuerto acabó abriéndole los ojos a Frederik. Aunque ya llevaba décadas trabajando con gafas, de repente detectó un nuevo nicho de mercado ligeramente olvidado.

"Entonces empecé a investigar qué tipo de gafas de lectura había en el mercado y luego empecé a conducir por todo el país para ver la selección en diferentes tiendas. Me di cuenta de que debe que se puede hacer mejor que esto. No había absolutamente nadie en el negocio minorista que se preocupara por estas gafas de lectura".

Siempre gafas

Se podría decir que Frederik Thieles ha nacido para esto. Como su apellido podría revelar, Frederik nació en la cadena danesa de tiendas de gafas "Thiele", que tras 200 años de existencia es el negocio de óptica más antiguo de Dinamarca.

Tras muchos años de trabajo en el negocio familiar, Frederik creó su propia cadena más pequeña de tiendas de gafas llamada 3 optik, que constaba de 6 tiendas, algunas de las cuales se encuentran en el aeropuerto danés. Mientras trabajaba en 3 optik, que vendía principalmente gafas de alta gama, Frederik fue ampliando su interés por las gafas de lectura.


Frederik Thiele & luxreaders

Frederik Thiele forma parte desde 2018 de luxreadersque en 2020 fue titulada como la segunda mejor empresa digital nueva por la Cámara de Comercio danesa. La misión detrás de luxreaders es poder suministrar a nuestros clientes gafas de lectura de la máxima calidad directamente a sus casas, por el mismo precio que las que habrían comprado en el supermercado o en otras tiendas minoristas.


Un gran potencial

Últimamente, el mercado de las gafas de lectura se ha disparado y las gafas de venta libre se venden en todas partes, desde los supermercados hasta las tiendas de moda de alta gama. Frederik Thiele se dio cuenta de que la mayoría de las gafas que se vendían eran de pésima calidad y tenían un diseño bastante cuestionable. La mala calidad y el diseño en general, así como la gran cantidad de personas con una dependencia extrema de las gafas de lectura, fue lo que le inspiró a comenzar su viaje en 2017.

"¡Es completamente surrealista cuando pienso en la cantidad de gafas de lectura que se venden! No es solo la gente de Dinamarca la que tiene problemas para leer, es un problema mundial. Solo en Europa se producen 400 millones de pares de gafas de lectura al año. Lamentablemente, la mayoría de estas gafas baratas son de baja calidad y simplemente feas", exclama.

 

Sentirse bien y verse bien

Fue entonces cuando Frederik Thiele se puso en contacto con su amigo, el inversor Thomas Olsen, para averiguar si podían revolucionar el mercado. Querían romper las reglas de la compra de gafas de lectura y crear algo que tuviera un diseño y una calidad impecables sin dejar de ser asequible.

Con estos fuertes requisitos, rápidamente llegaron a la conclusión, de que debía ser una tienda online. En 2018 se asociaron con los dos nerds del comercio electrónico, Nicki y Alexander Due, y juntos crearon la marca luxreaders - una tienda de gafas 100% digital. Gracias a la tecnología moderna, ahora es posible que los clientes se prueben las gafas de lectura mediante un espejo virtual y descubran qué formas y colores se adaptan mejor a sus deseos.

"Hemos hecho un gran avance con nuestra tecnología de prueba en relación con dar a los clientes una experiencia didital óptima. También nos hemos propuesto igualar el precio de las gafas de lectura normales: en nuestra tienda web se obtiene un producto mucho mejor", explica Frederik Thiele.

Además de la calidad, Frederik Thiele y compañía han tratado de establecer una amplia gama de estilos, dando a las gafas diferentes aspectos para diferentes ocasiones. En el surtido encontrará gafas para un largo día de jardinería, otras para fiestas y otras para la oficina.

"Hemos intentado luchar contra la idea de que las gafas de lectura son el escenario ineludible de tu vida. Hemos tomado algo que se considera poco sexy y hemos intentado hacerlo elegante. La ambición ha sido crear algo que sea lo suficientemente bueno como para que la experiencia sea menos complicada para el que compra por primera vez. Queremos que piensen: "Bueno, esto es realmente genial", dice Frederik.

Después de un comienzo difícil, parece que la visión de Frederik está a punto de triunfar. Hoy luxreaders vende sus gafas en línea en más de diez países diferentes y es capaz de entregar las gafas con gran rapidez a sus clientes, independientemente de su ubicación.

"Ha sido un proyecto realmente pesado de poner en marcha debido a los requisitos de mantener los precios bajos y la calidad al máximo. Por fin está empezando a dar sus frutos. Algunos días vendemos cientos de gafas y empezamos a ver gente que las lleva en público. A mí, personalmente, me hace mucha ilusión ver nuestras fundas y gafas en el paisaje urbano o en la televisión. Nuestro negocio llega constantemente a nuevos destinos, y estoy muy orgulloso de ello".

 

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